martes, 8 de julio de 2025

La insatisfacción de la existencia humana desde la filosofía budista ( versión mejorada del texto Símbolos de la muerte y renacimiento, cap. la naturaleza humana como insatisfacción).

Cap. La existencia humana insatisfactoria.
a. La existencia humana como insatisfacción desde la filosofía de Shopenhauer.
b. La insatisfacción de la existencia humana desde la filosofía budista.
c. Análisis simbólico del proceso de pérdida, caer , la ruina.
d. El pesimismo existencial en la serie Fargo.


La existencia humana como insatisfacción para el budismo.

La existencia humana, a menudo idealizada y engrandecida por narrativas de progreso y felicidad ininterrumpida, es fundamentalmente un estado de insatisfacción inherente. Esta verdad, lejos de ser una visión nihilista, es una piedra angular tanto en el pesimismo filosófico occidental de Arthur Schopenhauer como en la milenaria sabiduría budista. Aunque sus caminos y objetivos difieren, ambos sistemas de pensamiento convergen en la comprensión profunda de que la vida, tal como la experimentamos, está impregnada de un tipo de sufrimiento o descontento que va más allá de las meras adversidades externas.
La Dukkha Budista: Una Verdad Fundamental
En el budismo, el concepto central que aborda esta insatisfacción es dukkha. A menudo traducido como "sufrimiento", dukkha abarca un espectro mucho más amplio que el dolor físico o emocional. Tal como lo explica la Ven. Thubten Chodron en sus enseñanzas, dukkha se refiere a la insatisfacción, la imperfección, la incomodidad, la frustración y la naturaleza insustancial de toda existencia condicionada. No es solo el dolor evidente de la enfermedad o la pérdida, sino también la sutil inquietud que acompaña incluso a los momentos de placer. Como se establece en las Cuatro Nobles Verdades, la primera de ellas es que "la vida es dukkha".
El Dhammacakkappavattana Sutta (El Sutra de la Puesta en Movimiento de la Rueda del Dharma), el primer discurso del Buda, articula claramente esta verdad:
"Ahora bien, esta, monjes, es la noble verdad del sufrimiento: el nacimiento es sufrimiento, la vejez es sufrimiento, la enfermedad es sufrimiento, la muerte es sufrimiento; la pena, el lamento, el dolor, la congoja y la desesperación son sufrimiento; asociarse con lo que uno no ama es sufrimiento; separarse de lo que uno ama es sufrimiento; no obtener lo que uno desea es sufrimiento; en resumen, los cinco agregados del apego son sufrimiento."
La Ven. Thubten Chodron subraya que existen tres tipos principales de dukkha:
 * El dukkha del sufrimiento: El dolor evidente, físico y mental.
 * El dukkha del cambio: La insatisfacción que surge del hecho de que incluso los placeres son impermanentes y, por lo tanto, siempre terminan, lo que lleva a un sufrimiento renovado.
 * El dukkha omnipresente de las condiciones: La insatisfacción inherente a nuestra existencia cíclica (samsara), que se debe a que nuestra mente y cuerpo están bajo el control del karma y las aflicciones mentales. Este es el nivel más profundo de insatisfacción, ya que no importa cuán "bien" parezca ir la vida, siempre hay un substrato de inquietud y la semilla de un sufrimiento futuro. Los sutras budistas detallan cómo el apego, el deseo y la ignorancia son las raíces de esta insatisfacción continua, perpetuando el ciclo de renacimiento y sufrimiento.
Schopenhauer y la Voluntad Insaciable
Arthur Schopenhauer, un filósofo del siglo XIX, llegó a conclusiones sorprendentemente similares sobre la naturaleza de la existencia, aunque desde una perspectiva metafísica diferente. Para Schopenhauer, la fuerza impulsora detrás de todo es la "Voluntad" (Wille), una fuerza irracional, ciega e insaciable que subyace a toda la realidad, incluyendo la existencia humana. Nuestra vida no es más que la manifestación de esta Voluntad, y nuestra individuación como seres humanos con deseos y necesidades nos condena a un ciclo perpetuo de querer y no conseguir, o de conseguir y pronto aburrirnos o desear algo más.
Schopenhauer argumenta que el deseo es un estado de carencia y, por lo tanto, de sufrimiento. Incluso cuando un deseo es satisfecho, esta satisfacción es breve, solo para ser reemplazada por un nuevo deseo o por el tedio. La felicidad, en su visión, es meramente la ausencia momentánea de sufrimiento, una pausa transitoria en la inacabable búsqueda de la Voluntad. Célebremente, afirmó en El mundo como voluntad y representación:
"Toda satisfacción, o lo que se llama felicidad, es en realidad y esencia siempre negativa, no una gratificación original que entra por sí misma, sino solamente la satisfacción de un deseo, lo que significa que es la eliminación de un dolor. Pues si un deseo no es satisfecho, es doloroso; pero el desear en sí mismo es doloroso; por lo tanto, cada satisfacción es la eliminación de un dolor."
Y en la misma obra, Schopenhauer compara la vida con un movimiento incesante:
"La vida humana oscila, como un péndulo, de un lado a otro entre el dolor y el aburrimiento." Esta concepción resuena directamente con el dukkha del cambio budista, donde incluso el placer es inherentemente insatisfactorio debido a su transitoriedad.
Puntos de Convergencia y Divergencia
La conexión entre el pesimismo de Schopenhauer y el budismo es notable. Ambos reconocen la impermanencia, la insustancialidad y la inherente insatisfacción de la existencia tal como la conocemos. Ambos señalan el deseo y el apego como fuentes primarias de este malestar. Schopenhauer, en particular, encontró en el budismo una confirmación de sus propias intuiciones filosóficas sobre el sufrimiento y la renuncia al deseo como un camino hacia una especie de "salvación" o liberación.
Sin embargo, hay diferencias cruciales en sus soluciones. Para Schopenhauer, la liberación de la Voluntad se encuentra en la negación de la voluntad de vivir, que puede manifestarse a través de la contemplación estética, la compasión y, en su forma más radical, el ascetismo y la quietud. El camino es a menudo individual y puede llevar a una especie de resignación.
El budismo, si bien también enfatiza la renuncia al apego y al deseo (ignorancia), ofrece un camino sistemático y practicable hacia la iluminación y la liberación (nirvana) a través del Óctuple Sendero: la sabiduría, la ética y la meditación. La insatisfacción (dukkha) no es el final de la historia, sino la primera verdad que se debe reconocer para poder trascenderla. La meta no es meramente la ausencia de sufrimiento, sino la erradicación de sus causas y el desarrollo de cualidades como la compasión universal y la sabiduría. Mientras que Schopenhauer a veces se detiene en la descripción del sufrimiento, el budismo ofrece un camino claro y transformador para superarlo.
Conclusión
Tanto la Voluntad insaciable de Schopenhauer como la dukkha budista nos invitan a mirar más allá de las apariencias superficiales de la vida y a reconocer su inherente insatisfacción. Esta comprensión no es un llamado a la desesperanza, sino una invitación a la sabiduría. Para el budismo, es el punto de partida fundamental para buscar una auténtica libertad y una paz duradera. Al comprender la naturaleza de nuestra insatisfacción, ya sea a través del análisis de la Voluntad o de las enseñanzas sobre dukkha, abrimos la puerta a la posibilidad de una existencia más consciente y liberada, trascendiendo las ilusiones que nos mantienen atados al ciclo del querer y el sufrir.

La existencia humana como insatisfacción, Shopenhauer ( versión mejorada,texto Símbolos de muerte y renacimiento , cap. la existencia humana como insatisfacción).

La existencia humana: ¿insatisfacción inherente?
El filósofo Arthur Schopenhauer es reconocido como uno de los principales exponentes del pesimismo existencial, argumentando que el sufrimiento es una parte intrínseca de la vida humana. Pero, ¿qué causa este sufrimiento?
La voluntad como raíz del sufrimiento
Según Schopenhauer, la causa del sufrimiento humano reside en el despliegue compulsivo e inconsciente de la voluntad. Esta voluntad es una fuerza primordial que nos impulsa a desear y buscar ciertas experiencias. Sin embargo, es precisamente en la frustración de estos deseos y necesidades donde se origina el sufrimiento que fundamenta nuestra existencia.
Es importante destacar que esta "voluntad" no es una voluntad positiva orientada al crecimiento o a un hábito saludable. En Schopenhauer, se refiere a la necesidad de un egoísmo que busca su propia satisfacción, y cuyo despliegue tiene como consecuencia ineludible el sufrimiento existencial. Este sufrimiento impregna la vida humana, sin importar las diferencias superficiales en las formas de existencia.
La vida, en esta visión, es frecuentemente manejada y condicionada por una voluntad irracional y caótica que genera deseos. Cuando estos deseos son satisfechos, irónicamente, pueden generar más sufrimiento y angustia, tal como sugiere la frase de la canción "Náufrago" de Cuatro Pesos de Propina: "De qué vale ganar si cuando gano pierdo".
El mundo como sufrimiento: una regla, no una excepción
Schopenhauer sostiene que el dolor omnipresente no es aleatorio ni producto de la casualidad, sino una regla fundamental de la existencia. El sufrimiento abunda debido a necesidades y carencias insaciables. Tendemos a la ilusión de creer que las causas de nuestras necesidades y deseos "irracionales y caóticos" están separadas de una existencia de sufrimiento.
Citando a Schopenhauer en El mundo como voluntad y representación: "Es absurdo considerar que la inmensa cantidad de dolor que abunda por todas partes y que tiene su origen en necesidades y carencias inseparables de la vida misma no sirve para nada y es simplemente el resultado de la mera casualidad; cada desgracia aislada parece algo excepcional, pero la desgracia es lamentablemente la regla".
La ignorancia y negación del sufrimiento
En los momentos de dicha, solemos ignorar o negar la inminencia de un cambio hacia el sufrimiento o la incertidumbre. Si poseemos algo, sufrimos por el apego; si carecemos de lo que se desea, también sufrimos. Ambas situaciones son dos caras de la misma moneda de la voluntad o, como se describe en la filosofía budista, la "sed de experiencia".
Schopenhauer compara nuestra existencia con "corderos en el campo, que se divierten bajo la atenta mirada del carnicero". Si bien es raro no experimentar pérdidas o sufrimiento en la vida, la muerte será, sin duda, el carnicero que pondrá fin a cualquier felicidad duradera.
Además, las relaciones humanas son a menudo percibidas como un combate perpetuo. Los otros hombres son vistos como adversarios o instrumentos para nuestras propias aspiraciones de la voluntad. Schopenhauer lo expresa así: "La vida del hombre es un perpetuo combate, no solo contra la miseria y el hastío, sino contra los demás hombres".
La insatisfacción como fundamento de la existencia: la perspectiva budista
Para Schopenhauer, la existencia humana tiene en su fundamento la frustración o insatisfacción, un concepto que resuena profundamente con el dukkha (sufrimiento, insatisfacción) de la filosofía budista.
El Buda enseñó en el Dhammacakkappavattanā Sutta (El Sutra de la Puesta en Movimiento de la Rueda del Dharma), la primera enseñanza después de su iluminación, que:
> "Ahora, monjes, esta es la Noble Verdad del Sufrimiento (Dukkha): el nacimiento es sufrimiento, la vejez es sufrimiento, la enfermedad es sufrimiento, la muerte es sufrimiento; la pena, el lamento, el dolor, la aflicción y la desesperación son sufrimiento; la asociación con lo que no se ama es sufrimiento; la separación de lo que se ama es sufrimiento; no obtener lo que se desea es sufrimiento. En resumen, los cinco agregados de apego son sufrimiento."
Este dukkha se manifiesta en tres niveles:
 * Dukkha-dukkha: El sufrimiento obvio (dolor físico, mental).
 * Viparinama-dukkha: El sufrimiento del cambio (la impermanencia de la felicidad).
 * Sankhara-dukkha: El sufrimiento de las formaciones condicionadas, la insatisfacción inherente a la existencia misma en el samsara.
Es este último, el Sankhara-dukkha, el que más se alinea con la visión de Schopenhauer: "Es la insatisfacción general que viene con la existencia misma. Es el sufrimiento generado por la existencia condicionada."
Si hipotéticamente se eliminara todo sufrimiento de la vida de una persona, esta caería inevitablemente en una vida carente de sentido, vacía y de soberbia, lo cual demuestra el carácter imperfecto de la vida humana. Esto se puede relacionar con casos de personas que heredan una vida materialmente resuelta y experimentan un gran vacío existencial, sin metas ni desafíos, cayendo rápidamente en el hastío.
Schopenhauer compara esta situación con el cuerpo humano: "Así como nuestro cuerpo estallaría si se quitase el peso de la atmósfera, si se quitase el peso de la miseria, de la pena, de los reveses y los vanos esfuerzos, sería tan desmedido en el hombre el peso de la arrogancia, que le destrozaría, que le empujaría a la insensatez más desordenada, y hasta a la locura más furiosa".
Carencia y hastío: los polos de la existencia
Schopenhauer nos muestra cómo la mente humana busca y desea algo por carecer de ello, partiendo siempre del principio negativo de la necesidad. Una vez logrado el deseo, surgen otros, o, lo que es aún peor, se genera un estado de hastío.
"Trabajo, tormento, pena o miseria, tal es durante la vida entera el lote de casi todos los hombres". Y se pregunta: "Pero, si todos los deseos se viesen colmados apenas se formularán, ¿en qué se llenaría la vida humana, en qué se emplearía el tiempo?".
Despertar del "sueño ingenuo": la falsa esperanza de la felicidad
Schopenhauer, en El mundo como voluntad y representación, afirma que "todo hombre que ha despertado de los primeros sueños de la juventud, que tiene en cuenta su experiencia y la de los demás, que ha estudiado la historia del pasado y la de su época, si es que estas desagradables preocupaciones no le trastornan la razón, llegará a comprender que este mundo y el de los hombres es el del azar y del error, los cuales lo gobiernan a su antojo sin piedad ninguna".
El hombre que ha despertado es aquel que ha logrado un proceso de desilusión respecto a las representaciones que son los sueños (manifestación de la voluntad del ego). Comienza a vislumbrar que en el fundamento de la esperanza de los sueños de juventud, y luego en los diversos proyectos y ocupaciones para exorcizar los miedos, reside la semilla del sufrimiento que se manifestará como desilusión o desengaño.
Según Schopenhauer, el proceso de despertar no es un encuentro fortuito o una revelación pasiva, sino el resultado de un proceso activo y racional que lleva al sujeto a cuestionar y, eventualmente, a negar la propia voluntad. Para Schopenhauer, el pesimismo existencial es una medicina que nos sana de la grave enfermedad de las representaciones que proyectamos en la existencia, al exponernos con crudeza la verdadera naturaleza de la vida humana como sufrimiento.
Cuando el ser humano está dispuesto a ver su realidad tal cual es, a confrontar las esperanzas frustradas y el sufrimiento causado por su voluntad egoísta, logra comprender su propia existencia como un gran engaño, una gran ilusión. La contemplación de la repetición cíclica de deseos y frustraciones, y el paso a momentos de hastío, genera una profunda reflexión.
"Una vez desvanecidas la ilusión y la novedad, ya no producen ningún efecto; las estrellas fijas que iluminan los mundos solo producen hastío en el mejor de los casos".
"Dadle un gallo a Esculapio": la existencia como liberación
Schopenhauer, al igual que Platón y filósofos orientales, considera la existencia humana como una experiencia limitante, generalmente consecuencia de la ignorancia de la propia voluntad, las no virtudes o las tendencias kármicas (en la concepción de la transmigración de las almas en Platón y el budismo, respectivamente).
Tanto en la filosofía de Schopenhauer como en la budista, la meta no es simplemente "no existir" o "no reencarnar", sino no estar condicionados por la voluntad del egocentrismo en ese círculo condicionante. El Buda también enseñó en el Anguttara Nikaya 3.61 (Tittha Sutta):
> "Los seres están atados por el deseo, y por el deseo son liberados. Por el deseo son atados al samsara, y por el deseo son liberados del samsara."
Esta idea de liberación del condicionamiento es central. Como se menciona en el texto: "Cómo los hijos de un libertino, venimos al mundo con la carga del pecado sobre nosotros, y solo por tener que expiar el pecado, nuestra existencia es tan miserable y su fin es la muerte".
Mediante la muerte, termina el fuerte condicionamiento de esta existencia en la que, en la mayoría de los casos, desconocemos cuán condicionados estamos, y podemos liberarnos. De este controvertido concepto de la existencia como prisión o enfermedad, surge la famosa encomienda de Sócrates al saber que está por morir: "Dadle un gallo a Esculapio", en referencia a saldar la cuenta con el dios de la medicina.
Aquí tienes el texto completo y finalizado para que lo copies y publiques directamente en tu blog. ¡Ha quedado un artículo muy potente y bien estructurado!

domingo, 6 de julio de 2025

Arcano del ermitaño. Al final la verdad.

Arcano del ermitaño. La verdad al final del viaje.



El arcano del ermitaño es el senor del tiempo, que nos refleja cómo se a desplegado nuestro Ser, cómo se proyectó nuestro espíritu en el tiempo y espacio en el cual transcurrió el ciclo vital que termina.
El ciclo vital puede ser una vida biológica, un viaje, un vínculo, etapa de nuestra vida, etc .

El filósofo Diógenes es un personaje que es la fusión del filósofo de las culturas greco latina y los eremitas o caminantes solitarios de las culturas  cristianas y orientales.


El ermitaño es una llamada a mirar para adentro, hacia las profundidades de nuestro Ser.
Está en la cima de la montaña que representa a los logros de las metas, y tiene en una mano la farola con la que ilumina su camino.
El ermitaño a llegado al pináculo, a la cima de la montaña de su evolución y está dispuesta a compartir su sabiduría con los otros.
La estrella dentro de la farola tiene seis puntas representa a la estrella de David y es uno de los sellos de Salomón que representa la sabiduría.
El largo bastón representa a la estrecha senda de la iniciación, y es símbolo de poder espiritual.
Expresa a través de este símbolo la capacidad que tiene el ermitaño de transformar la experiencia de aislamiento y los conocimientos que a adquirido para llegar a los niveles más elevados de conciencia.
El manto gris representa la invisibilidad con la que oculta el conocimiento para hacerlo solo visible o compartirlo con quiénes estén preparados.

El ermitaño representa el examen de la conciencia, la introspección, la soledad que permite o habilita el autoconocimiento.

Concepcion esotérica del arcano ermitaño:

Esotericamente se lo asocia con el signo astrológico de Virgo, con el elemento tierra y la estación de otoño.
En numerología se lo asocia con el número 9 que es la culminación de todos los tiempos y la síntesis de todos los modos de existencia.
El planeta a que se asocia es mercurio.
Virgo es mutable, es también la fertilidad y fecundidad que permite, que libera nuevos niveles de conciencia.
La sacerdotisa analiza el conocimiento, mientras que el ermitaño analiza el pasado y el inconsciente como un espejo.
Se diferencia del hielofante o el papá en que al ermitaño no le interesa difundir el conocimiento sino que lo aplica a si mismo, a su proceso de introspección.
El farol simboliza la prudencia en horas difíciles, la vigilancia y el estar alertas.
Se vincula con la parábola de las vírgenes prudentes que tenían las lámparas preparadas para la llegada del marido, que simbólicamente es el destino.


Aislamiento que libera, Sol edad. 

El ermitaño se va a separar del mundo y sus parámetros de referencia de lo que es lo prioritario para poder analizar el mundo interno, que busca iluminar su inconsciente.
Con la farola y mirando hacia atrás busca iluminar el pasado, que es lo que carga sobre sus espaldas.
Dentro del farol hay una estrella de seis puntas, que es símbolo de la luz que surge de la conjunción de dos triángulos.
Representa a la luz que llevamos en el interior.
La barba es un símbolo de potencia, de conocimiento y autoridad, de un nuevo conocimiento que está representado por la nieve.
La nieve es la metáfora de una hoja en blanco , así como la posición del ermitaño indican la veneración de la tierra.
Su cuerpo puede parecerse a un atalaya donde el ermitaño se aleja del mundo y se puede encontrar consigo mismo y con la totalidad.

En el tarot Osho Zen:

La soledad del ermitaño en el tarot Osho Zen está en presencia de sí mismo, sin necesidad de nadie más para esa conexión.
La soledad como una experiencia existencial fértil y está discriminada o diferenciada de la experiencia de desolación en la cual hay ausencia y carencia del otro.
La soledad es entonces un momento necesario para revisar y analizar, para iluminar con el farol la experiencia del pasado.
Tanto en el tarot de Rider White como en el tarot de Osho Zen ambos tienen una edad avanzada y se apoya en un bastón que representa la experiencia ya vivida que se transforma en sabiduría.
El monje brilla con propia luz, y es en todo momento un recuerdo de el despliegue de la propia luz.
El arcano del ermitaño nos habla de crecer en soledad, de realizar la condición de semilla.
El monje es calvo y mediante ello se representa la humildad, el estar más allá de la mente y renunciar al Samsara.
Frente a si encontramos un acantilado, que nos habla de un destino desconocido y al cual nos vamos a ver lanzados, presipitados tras la experiencia de retiro o aislamiento para sintetizar la experiencia anterior.
La capa que tiene nos indica que aprendió la lección de no echar raíces en el Samsara y sus efímeros refugios sino en si mismos.

El ermitaño en viaje entre vida y vida.

"Que queda de nosotros sino un ataúd, lleno de frases?".
" Luz castrada de esperanza que se vierte en la infinita oscuridad de la catacumba".

" El mundo entero es un conjunto de nubes, ni la gloria ni el poder logran atarme ".

" Mi cuerpo es como un vehículo que veo desvanecerse, pasar , desvanecerse en un río".

El ermitaño y la muerte.

El ermitaño mira hacia atrás al propio pasado, para iluminarla y también poder iluminar su propia mente, y así lograr una síntesis.
La muerte existencial o la cercanía a la muerte física puede provocar la introspección y el mirar a lo pasado para iluminarlo o por el otro lado puede ser que la introspección y contemplación del pasado lleve a una transformación y muerte existencial en algún o varios sentidos.

El ermitaño se encuentra en la cima de la montaña y allí puede, en función de sus conocimientos y comprensión, llegar a una profunda comprensión de la experiencia adquirida y también llegar a los más altos niveles de conciencia.

En el tarot de Osho Zen el ermitaño se corresponde con la carta "la soledad", en la muerte y en todas las transformaciones profundas las conexiones con personas u objetos significativos en los cuales el ego se proyecta y constituye se van a ver suspendidas, y hasta anuladas o nihilizadas por la fuerza arrolladora del morir existencial o físico.

El manto azul es un símbolo de humildad de la conciencia humana ante la infinitud del cosmos y el transcurrir entre vida y vida del espíritu.
Lo efímero del tiempo está representado por el reloj de arena, así como la arena se va cayendo, la fuerza que sostiene la vida se va agotando incesantemente, inevitablemente.
Las horas y su transcurrir siguen al hombre y es la última la que lo impide de seguir transcurriendo en el tiempo, la muerte es así la posibilidad que anula todas las posibilidades de acuerdo a la concepción antropológica de Heidegger del "ser para la muerte".

"Con la fuerza de la voluntad e llegado a la cima más alta".
En ella el ermitaño puede trascender la rueda de nacimientos y muertes condicionadas y que a su vez pueden condicionar aún más para poder retirarse a su propia luz, a la cima de la montaña.
Desde allí puede proyectarse a la existencia desde una voluntad más trascendental , apagando la sed de experiencia.

En el texto "yo, el Tarot" de Jodorowsky escribe sobre este arcano:
" Luz castrada de esperanza que se vierte en la infinita oscuridad de las catacumbas".
" Más verdadero que los huesos de un profeta".
"Ni la gloria ni el poder logran atraerme".




La agonía y el éxtasis de la muerte y renacimiento en el arte.

La agonía y el éxtasis en el arte.

Vemos algunas expresiones que podemos conectar con el tema en el viaje del héroe, como nos amplían y describen la experiencia.

Hamlet, Shakespeare.

"Si está carne por demás maciza se disolviera, se derritiera como el líquido del rocío".

" Cuan tristes, rancias y sin provecho hallo todas las cosas de este mundo".
Las cosas del mundo se perciben y experimentan sin sentido pues es así como se experimenta el ego que estaba proyectado en esas " cosas".

";horror!, es como un huerto íncubo que brama por doquier".

"Porque temerle?!, no es digna en un ápice mi vida, y en cuanto a su esencia, tampoco es inmortal ".
Es lograr una visión de que no tiene sentido resistirse a la desintegración de todo por la impermanencia y la muerte.

" Este lugar, la tierra, me parece un estéril calvario ".
La experiencia de la vida en la tierra desde una visión nihilista, es lo que abre la puerta al desapego.

La canción en si refleja la necesidad de salir de un mundo enajenado y despersonalizado para encontrarse con su esencia.
En las experiencias cercanas a la muerte, las personas tienen una sensación de no agresión, de no dolor, de profunda paz que los conecta con lo más auténtico.


" Este majestuoso techo sembrado de luces doradas, es solo para mí un conjunto de inmundos y pestilentes vapores".

" Me llevo a cuestas más de mil veces, hoy toda su vista me horroriza". ( Sobre calavera de bufón).
Todo lo que era esa personalidad a desaparecido, dejando una calavera, que era lo que estaba siempre presente aunque no visible".


La divina comedia.

Al comienzo se encuentra en un bosque al cual a llegado sin saber cómo, y luego afirma que estaba dormido. 
En la concepción de la filosofía budista, se encuentra uno en el estadio del sufrimiento por ignorancia, por no haber despertado a la verdad.
Las tendencias destructivas que se representan por los tres animales con los que el héroe que es Dante se ve impedido de liberarse de la prisión de ese estado.

Virgilio, su maestro e inspiración en vida es quien lo guiará a través de la confrontación con la sombra que son los seres infernales, y así lograr ascender por la montaña al paraíso.

" Espíritus dolidos que clamaban por la segunda muerte".
La muerte que los saque de ese estádo, que permita renacer en un estado mejor.
( Agregar imágenes de revelando el velo, y contenido de la fundación juan march.
El infierno como la noche negra del alma.

En el infierno, como vivencia existencial, es cuando el yo se ve expuesto a su disolución, ella puede ser consciente o no y en ello está en gran medida la experiencia de infierno.
En la mayoría de los casos la perdida de referencias de sentido que antes se tenía, es vivenciada desde la angustia y la incertidumbre.
Allí se encuentra, sin saber cómo llego y sin poder salir , pues los elementos de su ego también lo llevaron allí ahora no le permiten salir .


A mitad del camino me encontré en una negra selva, pues la recta vía se había perdido."


Caminando hacia lo desconocido.

A partir de que se cruza el umbral entre lo conocido hacia lo desconocido ya no hay realmente vuelta atrás, la concepción de la realidad y de nosotros mismos se ve quebrado, hay una profunda ruptura que no puede volver a refugiarse en la antigua esperanza.
Es como la metáfora de los ojos que se han abierto y no pueden volver a cerrarse.

También es en la experiencia descripta por Grof de aprisionamiento, de infinita sin salida., que potencia la desintegración del ego y sus esperanzas que son lo que más lo estimulan , lo encienden.
" Al ingresar aquí abandonad toda esperanza".



A Horse with no name.



Está canción es interpretada como un estado cercano a la muerte, en dos momentos habla de que ya está muerto, y que es allí que logra liberarse.

El protagonista necesita liberarse en una experiencia liminal de los condicionamientos de la sociedad para poder así ver su vida y la vida toda en perspectiva, desde una visión más amplía.
" En la primera parte del viaje estaba mirando toda la vida.

El desierto, un mundo sin referencias donde encontrarnos.


" En el desierto no puedes recordar tu nombre, porque nadie puede causarte dolor"
En ese plano o mundo que es el desierto 🐪, uno no está a la defensiva de su ego, y puede encontrarse con su esencia.
La conexión que se experimenta en esos estados alterados de conciencia es de ausencia de agresión y conflicto que en la vida cotidiana ni siquiera se percibe.
De la agonía de el sufrimiento a la profunda paz del éxtasis, se capta, vivencias está gran diferencia.

" Después de nueve días dejé el caballo,el desierto se había convertido en río".
La realidad que parecía estéril se convierte en fuente de vida que fluye, con lo que se identifica a un río.
Es entonces que puede dejar el caballo que se puede interpretar como el ego que nos lleva a través de las experiencias de la vida.

La experiencia de un rio que se transforma en mar puede significar o se puede interpretar como el cambio constante y la impermanencia de la vida.
También como el llegar al destino.
La canción en si nos muestra la necesidad de liberarnos de la alienación, de el estado de enajenación por toda la tensión y hasta violencia de las experiencias de la vida para encontrarnos con lo que es nuestra naturaleza auténtica.
" Es bueno no estar bajo la lluvia".

En la experiencia de apoteosis o muerte y renacimiento, se disuelve la identidad y las referencias para producirse una regeneración hacia una nueva identidad y o modo de existencia.
Es común a las distintas tradiciones culturales el describir esos procesos liminares en parajes distantes como montañas o desiertos que es muy usual.
Cómo la experiencia de Jesús en el desierto.

El desierto se interpreta también, desde otra perspectiva como un umbral a el más allá desconocido o místico, que nos puede permitir la redención y transformación.
" In the desert you cant remember your name".

En el comienzo se produce la separación del mundo conocido , que se da con una descripción del nuevo mundo al que se está llegando, , se está dejando atrás el mundo de la vida material compartida, de conversiones sociales, para ingresar en ese mundo de visión más amplía y de diferente racionalidad.
" In the first part of the jorney i was looking at all my life".

El caballo sin nombre.

" I have been thorought the desert with the Horse with no name ".
El viaje es a través de el vehículo de el caballo, que al no tener nombre es símbolo de que ya no tiene la identidad social que nos limita y condiciona a nivel de la posibilidad de comprensión o conciencia.
El caballo es el ego también domado, o que al menos no nos domina a nosotros y podemos así utilizarlo para que nos conduzca al umbral de la conciencia de lo conocido.
El experimentador, utiliza un instrumento ( el caballo), para realizar un viaje de instrospeccion y ni siquiera puede darle un nombre para describirlo, es el viaje a las profundidades del inconsciente.

No hay ego y no hay dolor.

" Cause there aint no one to give no pain".
El aislamiento de los otros nos puede conectar con un estado más auténtico, y purificarnos, ya no causa nada dolor y tampoco lo causamos.
No hay roles ni relaciones, es así que el ego se disuelve.
En la concepción budista de la psiquis humana, las condiciones de existencia condicionada que son en su fundamento de sufrimiento, son las que tienen como consecuencia inevitable de una mente condicionada por el ego.
Si hay ego que nos separa de los demás hay sufrimiento.

Análisis de canción " one", , la disolución del ego.


En el viaje del héroe casi nunca podemos separar una etapa de otra , la disolución del ego, que vemos representada por el arcano del colgado, da lugar, permite acceder a la agonía y éxtasis del renacimiento.
En esta letra hay una destrucción literal y figurativo del ego a través del desmembramiento del cuerpo y la anulación de sus sentidos.
Es así, a causa de ello, que el sujeto se enfrenta a todo el dolor , y agonizar.

La desaparición del mundo, la infinita oscuridad.

La perdida de su yo físico al perder sus extremidades , sus sentidos y de su movilidad representa la muerte de su yo social y gran parte de la funcionalidad del yo físico a quedado neutralizada.
Simbólicamente está fase refleja la disolución del yo o ego, el yo se disuelve en una oscuridad sin forma , como ocurre en los mitos de transformación, como en el vientre de la ballena, etc.
Al disolverse el mundo exterior y anularse el físico, la referencia que es para el yo lo externo de lo que es el también desaparece, quedando en un vacío total con el cual  se ve enfrentado ineludiblemente.

" I can't remember anything, Can't tell if this IS true or dream".

En el umbral, oscuridad y vacío.



Es así que se encuentra en una forma de fase liminar, de umbral entre un mundo y otro , en una forma de purgatorio existencial que experimenta sin salida, sin renacimiento.
La oscuridad es el espacio del inconsciente, el caos primordial , la oscuridad primaria de la cual todo surge y hacia la cual todo se dirige.
Esa experiencia existencial, ese momento, es representado con el descenso al inframundo, una etapa de reflexión forzada , donde se confronta con el dolor más profundo, en este caso el dolor de todo lo que experimento en la guerra.
" Darkness, imprisoning me, " Allá that i see, absolute horror".

La negación del renacimiento.

A diferencia de otros relatos, de otras experiencias, el protagonista no desea vivir, no desea renacer, tan solo que termine la pesadilla.
" Dios por favor, despiértame".
" Hold my breath as i wish for death".
El deseo de no seguir existiendo, que tanto se niega, puede ser interpretada también como un deseo de trascendencia.



La agonía y el éxtasis de la experiencia de muerte y renacimiento en las matrices perinatales de S. Grof

El proceso de muerte y renacimiento y la disolución del ego.



Que es el proceso de muerte y renacimiento?

En todo proceso de muerte y renacimiento existencial de cambio profundo o directamente biológico, las personas se mueven a través de la reexperiencia de matrices perinatales, de revivencia consciente o inconscientemente, de los patrones de experiencia de la muerte y renacimiento que se vivió en el íntegro proceso de nacimiento biológico.

Cada fase se experimenta de acuerdo a la integración y sanación de esta en la psiquis profunda, experimentando se interna o externamente de forma sincrónica .
La segunda fase , por ejemplo es la segunda Matrix perinatal que es experimentada en el modo tóxico como un estado infernal que no tiene salida.
Es relacionado simbólicamente con el estado infernal o noche oscura del alma, que está descripta en diversas culturas que poseen instrucciones escatológicas post mortem.

Cuando se da el pasaje de la segunda a la tercera matriz perinatal en la cual hay un vislumbre de una salida , que tiene su correlato con las experiencias cercanas a la muerte en las cuales hay un vislumbre de una luz al final del túnel 

Así, tienes una sensación de aniquilación total, de destrucción, tocar fondo, y salir hacia la luz, se siente que hubiera una lucha y luego se sale, de donde queda la muerte?.
Otro proceso de muerte y renacimiento se experimenta en el canal de parto pasando horas luchando por respirar.
Siempre está presente la experiencia de la muerte en el pasaje, hasta que punto va a depender de como se experiencia haya sido.
Así puede pasar que uno emerja como un recién nacido biológico pero aún está incompleto y psicológicamente se encuentra aún dentro del útero.

En la metafísica de la alquimia y el esoterismo occidental, y en la filosofía budista, se considera que el nacimiento en un plano de existencia no es garantía de que se haya nacido a nivel consciente a el mismo.

Hay otro proceso de muerte en si mismo que es el que se da con la experiencia del canal de parto en el cual nos identificamos como un ser contraído, y limitado, y al agonizar muere con todo lo que nos sentíamos identificados.
Lo que las personas que se han estancado en ese estado deben comprender es que deben soltar ese ser falso e ilusorio que está muriendo y salir al mundo hacia lo nuevo.

Segunda matriz perinatal.

Las contracciones comienzan cuando el córtex todavía no está abierto, hay una opresión física y también existencial.
Se tiene la experiencia de un descenso a un remolino de vorágine.
Al cortarse o disminuir bruscamente el flujo de oxigeno, hay una experiencia de peligro casi omnipresente.
Junto con este peligro existencial, hay una experiencia de perder el paraíso que se experimentaba en la matriz perinatal anterior, y una caída a un estado infernal.
Recreando la experiencia de condena y castigo de Adán y Eva y su expulsión del paraíso.


En esta matriz vemos, junto con el pasaje a la tercera, la experiencia de agonía y de éxtasis, que en la simbología de Jung se corresponde con el arquetipo de la muerte y renacimiento.


La vivencia en general es de estar abandonados a una experiencia angustiosa de desmoronamiento infinita.
Hay una vivencia de un peligro cada vez mayor de perder la propia identidad, de quedarse sin referencias sobre lo que uno es, tanto interna como externamente.
No hay un origen definido del peligro, y el mundo entero se interpreta en términos paranoicos.
Se tiene la experiencia de ser engullido, devorado, por una entidad superior, ante la cual uno se encuentra totalmente impotente.
La conexión con experiencias vinculadas a esta matriz pueden ir acompañadas de gran ansiedad, peligro de muerte, impotencia, sufrimiento físico o emocional agudo, claustrofobia, etc.
En una experiencia más transpersonal, está experiencia puede viveciarse como conexión con el dolor de la humanidad, etc.

Eventos difíciles de nuestra , de gran presión y sin salida nos pueden hacer conectar con está Matrix, con la sensación de estar " entre la espada y la pared".
" callejón sin salida", teniendo un sentimiento de impotencia, de rechazo o sentirse abandonado, de victimismo, etc.
Junto con estás vivencias asociadas con la experiencia de victimismo, de ser objeto de sufrimiento, puede haber una experiencia de gran desilusión ante la vida, depresión, etc.

Cuando pasamos de la matriz perinatal uno a la segunda la experiencia estática de fusión se transforma en una experiencia con un otro antagónico, en qué podemos experimentar la polaridad de víctimas o victimarios.
En la medida que se va procesando, hay muchas más posibilidades de actuarlo en el mundo cada vez menos o que directamente no se experimente exteriormente.

Cuando está segunda matriz es tóxica o patológica, se pasa de una experiencia oceánica a una experiencia amenazante, que busca destruir la existencia individual.
El hecho que tenemos que tener claro es que si estamos vivos y mínimamente sanos es porque logramos superar la contracción Saturnina , y transformarla en impulso para ir al mundo con más fuerza.


En un ser que está incapacitado para formular un sentido del tiempo y espacio, está sensación de opresión puede durar una eternidad.
En este punto nos identificamos, nos percibimos como como una víctima pasiva de la realidad ante la cual nada puede hacer, se experimenta una sensación de impotencia.

Las experiencias de destrucción tridimensional, de embudo o torbellino, tirando del sujeto hacia un centro son muy características de esta etapa.
La característica de esta etapa es la experiencia de un peligro inminente, de destrucción de la psiquis , imponiendo un movimiento unidireccional, sin posibilidades de modificar la situación.
La sensación de que una fuerza exterior nos empuja a una  situación que no podemos evitar y que nos destruye.
El remolino engullidor representa un peligro grave para un organismo que flota libremente en el agua y le impone un movimiento unidireccional.
Una representación simbólica de la experiencia de esta matriz cuando es revivida en un estado alterado de conciencia la constituye la imagen de ser devorado por un leviatán gigantesco, un monstruo o ballena.
El sujeto experimenta torturas físicas y psicológicas, sin encontrar salida al mismo.
Bajo la influencia de esta matriz, el sujeto no encuentra la posibilidad de algo positivo en su vida, hay una experiencia de inevitabilidad, de impotencia frente a la existencia.
Hay desesperación existencial y culpabilidad.
Una experiencia de ser víctima de fuerzas destructivas de las cuales no se puede escapar y que casi siempre desconocemos las causas.

Tercera matriz perinatal.

En la tercera matriz perinatal hay una compresión sobre el feto pero hay una salida uterina que se abre 
Se produce una conexión pasiva agresiva entre la madre y el feto que se introyecta luego a lo que es el individuo y el mundo.
Mediante esa interacción tensa de lucha se activa la energía marciana en el mundo que permite, que facilita que se active la energía marciana para irrumpir en el mundo.
Puede haber una experiencia de la fragilidad de nuestra biología, de nuestra individualidad, en relación a los elementos exteriores de la realidad.
Cómo parte de la dualidad inherente de la experiencia de esta matriz , podemos tener experiencias emocionales de identificación o posesión, que podríamos trascender al lograr una ecuanimidad, logrando una visión desde una perspectiva trascendental.
En esta matriz hay una sensación de asfixia, de no poder salir de la presente situación y necesitar salir hacia delante.
Hay una polarización de estados de esperanza y desesperanza, se puede dar un atisbo de un rayo de luz al final del túnel.
Hay una esperanza de liberación cercana, Grof asocia está fase con los relatos míticos de lucha y liberación que se relatan en las distintas culturas.



Cuarta matriz perinatal.


En la cuarta matriz perinatal hay una sensación de liberación inminente, y un estar lanzado hacia fuegos purificadores.
Hay , en este punto, una fuerte identificación con el estado de renacimiento, y también puede expresarse en la vivencia de símbolos universales como puede ser kali, Osiris , cristo, etc.

En la cuarta matriz perinatal hay una muerte del feto que estaba casi fusionada con la madre, para nacer como individuo 
En la práctica budista se busca disolver la deidad que se está visualizando para así, tras fundirse en el vacío, reaparecer como la deidad, entrenándose a desidentificaese con una forma o ego y tomar encarnación de forma ecuánime.

Tras la experiencia de presión y de lucha de las matrices anteriores, se tiene la sensación de alivio de sentirse renaciendo.
Está primera mudanza o transformación va a condicionar la forma de atravesar cada transformación.

La agonía y el éxtasis de la muerte y renacimiento en la astrología

Plutón, la transformación radical 



Pluton es un planeta que marca la conexión con el proceso del morir y renacer, y por lo tanto de como nos conectamos en su esencia con la existencia.
Plutón era la deidad romana que regia el hades.
El hades es el mundo de los muertos que se puede interpretar como el infierno.
Simbólicamente se relaciona con las cavernas, con lo subterráneo, con el inconsciente.
Plutón está muy asociado al sistema reptiliano, al proceso de supervivencia.

En la apoteosis de la muerte y renacimiento se da la disolución de la identidad, cuando no vaciada completamente, y desde este vacío necesita reconstruirse.
Core,  antes de ser secuestrada al hades, su conciencia es pura, al ingresar al hades también ingresa en sus propios precipicios.
entrando allí en contacto con su propia oscuridad, con su aspecto de instinto de supervivencia.
La integración de lo negado, de lo prehumano, de la sombra, es la base, el fundamento de una auténtica ampliación de la conciencia.
Cuando logramos integrar , aceptar auténticamente , lo que excluimos, podemos acceder a un nuevo nivel de conocimiento y de evolución.
De hecho toda restricción o limitación por temor, no es causa de conocimiento o conciencia sino de todo lo contrario.

La experiencia de Plutón es generalmente una experiencia de extrema tensión, de muerte y renacimiento.
La experiencia de Plutón es una experiencia de pasaje iniciático, de purga purificadora que nos quita todo poder, ya que Plutón es el poder.
El poder de Plutón es el de ir de muerte en muerte, de mutación en mutación,con intensidad.
Hay una gran entrega al presente pues se a aprendido a aceptar la impermanencia, el que todo termina.
Don juan: " debes vivir como si tuvieras la muerte permanentemente a tu lado".

Plutón nos a ido ayudando a integrar todas las realidades que hemos experimentado con los anteriores transpersonales.
En su potente impermanencia, nos ayuda a construir un mundo transpersonal y paralelo a este.

El proceso de Plutón requiere necesariamente un soltar y dejar ir para lograr un nuevo nivel de revitalización. Las crisis plutonianas implican, un desapego total y profundo, pero que abre las puertas de la conciencia a un nuevo nivel de riqueza y profundidad en la conexión con uno mismo y con los otros.

En el mito de Hades y Persefone, está es forzada por Hades al ir al inframundo, donde conoce toda su sombra.
Al atravesar esa situación, adquiere una nueva perspectiva de la realidad.

Plutón es un megatranspersonal que no trabaja en beneficio de un propósito de un ego particular sino de un propósito colectivo y transpersonal.
El concepto del orgasmo es una " petit morte", en la cual se sale completamente de si mismo, para revolucionar nuestra conexión con la realidad, tanto interna como externa.
Luego de decidir soltar y dejar ir algo que nos estancaba, se produce una fuerte experiencia de liberación y gozo profundo.

Cuando logramos integrar el poder liberador de Plutón, podemos lograr un poder libertador de todo lo que nos estancaba. Cómo Persefone, si hubiese sido acompañada al inframundo, la experiencia hubiese sido mucho menos traumática y disocia te.
Y al haber sido consciente, la experiencia sería mucho más costruciva y luminosa.
Puede ser la diferencia entre una experiencia que provoca una transformación profunda, y la experiencia que provoca trauma o psicopatía.
El terapeuta plutoniana, acompañando a las mujeres en la barca al otro lado.
Al tener un fuerte Plutón , grandes capacidades para explorar lo inexplorado.

A los muertos se les ponía unas monedas en los ojos en el ir al más allá, siempre hay que pagar un precio, no existe un Plutón light.
La experiencia del mundo, es causa de sabiduría, pero también tiene un precio.
Plutón es el que sana el temor a la oscuridad, a la propia sombra en definitiva.
En la transformación profunda debemos pagar el precio de la noche oscura del alma, para así nacer a la luz.
Cómo ocurre en las operaciones, uno es despojado de todo para poder cambiar en el proceso de la operación.
Plutón es así el gran purificador, el gran liberador.


Simbolos de la agonía y el éxtasis

Arcano de la muerte y renacimiento, la transformación.

" Mientras no mueras y renazcas eres un desconocido para la tierra". Goethe.

En el arcano que antecede ( el colgado) hemos visto como el héroe a quedado vulnerable, impotente, frente al abismo de su propio desmembramiento, de su propia disolución.
Aquí vemos representada la disolución de las anteriores ideas, de los anteriores roles, sus anteriores caminares o emprendimientos, representados por sus pies, y sus acciones en el mundo, representadas por las manos.
Al desmembrarse todo lo compuesto como el yo o individualidad, se cae esa estructurada individualidad que según la filosofía budista nos dedicamos permanentemente a perpetuar, causando así el sufrimiento.

Los brotes amarillos son el surgimiento de la sabiduría, de la intuición, sobre el abono de los restos del ego caídos.
En el arcano n. 20 que es el juicio, las semillas plantadas en la gran alquimia que es la muerte dan frutos por el emerger de la nuevos seres de las tumbas.

El perder, el dejar ir es un sufrimiento pues nos aferramos a las cosas, y a los roles o lugares.
No queremos perder ni el cabello ni la energía que naturalmente se nos pierde.
Estamos naturalmente apegados a nuestro cuerpo, y de manera compulsiva a nuestra personalidad.

El esqueleto simboliza el fundamento de nuestra individualidad que está más allá de uno mismo como persona y su forma corporal.
El esqueleto son la base fundamental de la realidad, desde la cual se agregan los músculos, etc.
Desde allí pueden agregarse las mascaras ,etc que constituyen nuestro ego o individualidad.
El esqueleto es al mismo tiempo lo universal que nos iguala a todos, y al mismo tiempo lo más íntimo y personal, es lo oculto, el tesoro escondido bajo la apariencia carnal.
Nunca podemos tocar o hasta ver nuestros huesos, pero son embargo son lo más propio de nosotros mismos.
Es como un reflejo del transcurrir del tiempo, lo que transciende las distintas circunstancias.
La guadaña lo conecta con Saturno, Dios de las cocechas, de la consecución del tiempo, de la descomposición y disolución.
(Aquí imagen del esqueleto).
Paradojalmente la guadaña está impregnada de sangre, simbolizando la destrucción de todo a lo que nos aferramos, pero al mismo tiempo es lo que fertiliza la tierra para que surjan los brotes de la sabiduría de la experiencia.

El esqueleto de la muerte es una figura andrógina que representa con ello la multiplicidad de posibilidades que están implícitas en todas las posibilidades de existencia.
El concepto de ser para la muerte de Heidegger nos habla que siempre es posible y al mismo tiempo es la posibilidad que está implícita en todas.
Al negar la muerte, no querer o poder verla , estamos implícitamente negando la existencia.
El número 13 , que es el número de este arcano, se  interpone cortando el ritmo de los doce meses.

La confrontación con la muerte nos enfrenta, a la soledad de la existencia, a la conexión siempre individual con el mundo.
Es un principio que activa , potencia la individuación.
Nos conduce, al igual que Hamlet, a realizar un soliloquio sobre la existencia propia y el sentido de la misma.

Es muy difícil definir como una vida humana comienza y cuando termina, se convierte en una generalidad, en la medida que avanza el conocimiento humano.
( Vida intrauterina, vida después de la muerte).
La muerte se convierte así en un drama autocreado, que interrumpe los dramas menores de nuestra vida cotidiana.
El horror ante la muerte es muy diferente de el miedo a morir que se deriva del instinto de autoconservacion, el horror ante la muerte es como un terror existencial ante lo desconocido e incontrolable.
"Fue nacimiento y muerte,
este nacimiento fue dura agonía para nosotros".
Poema de T. S. Yort.

Para el héroe, ingresar en la muerte y sombra conscientemente se habrá convertido en un extraño en su propio país, para su propia gente.
Será extraño para sus propios pares pues habrá experimentado cosas que nadie más experimentó.

Arcano sin nombre.

Después del vacío y desarraigo del colgado, te invito a una limpieza radical del pasado, a una transformación que surge de las profundidades preverbales, preculturales, de nuestro Ser.

Es de la sombra del negro profundo que puedo emerger como humanidad de carne y hueso.

Es un arcano que está numerado pero no titulado, co responde como en un eco al arcano del loco.
Son dos aspectos complementarios de la misma energía fundamental.
El punto rojo en el codo y la rodilla indican la comunicación con la virtud.

El ojo de la cabeza es porque ciega, al azar toda vida, ya sea " bella" o " desagradable", como una forma de amenaza permanente y hasta hostil sobre la vida.

" Soy como una transformación profunda que te lleva de la mortalidad ( cotidianidad), hacia la inmortalidad ( infinito).
" Yo soy el fin de la conciencia individual ".
" Yo soy el fin de la infancia, yo acallo sus dificultades, sus fracasos, sus triunfos, sus placeres, sus padres e hijos".

" Gracias a mi todo se convierte en polvo y se hunde".

" Hago de la destrucción un fenómeno de extremo esplendor".

" Cuando te conviertes en puro espíritu desaparezco.".

" Si quieres conservar algo, tú, que no tienes nada, lo perderás".

" Sacrificando tu conciencia, entregándola a la última de las intuiciones".

" Quieres fuerza,? aceptando me seras el más fuerte ".
" Quieres sabiduría?, aceptando me seras el más sabio".

" Te devuelvo muerto en vida, y te confirmo la mirada pura de los muertos ".

" Desaparece en mi para ser por fin la totalidad".

" Yo soy la purificación radical, 
soy el fin de la ilusión,
soy el trabajo del inconsciente ".
Soy el rostro destructor de la divinidad".
Yo soy el que soy ".